Salvador Lacy Perez de los Cobos nos ha facilitado información muy valiosa que le agradecemos enormemente.
Resulta que la Ermita estaba presidida por una Inmaculada de finales XVIII principios XIX, que había sido mutilada en guerra. Salvador Lacy personalmente la bajó y la llevó a San Nicolás, entregándola en nombre de “Narra” (Maria Josefa Cernuda y Pascual de Bonanza) a D. Ramón Egio (Párroco y Deán de la Concatedral) en Enero de 2014, con intención de que fuese restaurada y ubicada en la Concatedral para el culto.